El proceso de socialización

¿Qué es la socialización en perros?

Digamos que podría resumirse cómo la forma de enseñar a nuestro cachorro o perro adulto, a vivir en el entorno que le rodea respetando a otros animales y humanos. Socializar es la forma que tenemos para definir el acto de entrar en sociedad, y es un proceso realmente importante que todos debemos seguir.

Debe efectuarse cuando son cachorros, después de que hayan sido vacunados para evitar riesgos innecesarios. Durante la socialización nuestro cachorro entrará en contacto con otros animales, por lo que debemos esperar de forma obligatoria a tener todas las vacunas necesarias antes de salir a la calle.

Nuestro cachorro o perro adulto deberá socializarse con otros perros y diferentes animales, además de por supuesto de con humanos. La diferencia entre un perro amable, respetuoso, bien educado y un perro agresivo, no sólo está en su educación sino también en la forma de socializarse que ha tenido a lo largo de su vida.

¿Cómo socializar a un cachorro con otros perros?

Cuando salgamos a pasear con nuestro cachorro debemos ir a zonas donde hayan mas perros, para que pueda interactuar con ellos. Si tenemos un poco de miedo a que otros perros adultos le lastimen, podemos consultar con sus dueños previamente para asegurarnos de que no se trata de perros agresivos.

La mejor edad para comenzar a socializar a nuestro cachorro es a partir de los 3 meses de edad, tanto con otros perros cómo con personas adultas y niños.

Los perros se conocen y se saludan oliéndose sus partes, se huelen el culete y también sus genitales, en ocasiones incluso se lamen. Es algo totalmente normal que debemos dejar hacer a nuestro cachorro, es su forma de presentarse a otros perros.

La mejor forma de socializar a nuestro cachorro es dejarle conocer a otros perros, jugar con ellos incluso reñirse un poco. Ellos se marcan sus propios límites y tienen sus señales de advertencia cuando hacen algo que no les gusta (se gruñen un poco), así que simplemente debemos dejar que la naturaleza haga su propio trabajo.

También es muy recomendable que invitemos a nuestra casa donde obviamente también estará nuestro cachorro, a amigos que tengan cachorros o perros adultos. Nuestro cachorro debe comprender que en casa pueden entrar otros perros y estar con el jugando o conociéndose.

El contacto con perros de diferentes edades y razas, enseñará a nuestro cachorro a respetar a otros perros y convivir con ellos de forma pacifica.

¿Cuáles son los errores más comunes a la hora de socializar a un cachorro?

Muchas personas cogen a sus perros en brazos o los apartan cuando van paseando y se cruzan con otros perros de mayor tamaño… eso es un grandísimo error que fortalecerá el miedo en nuestro cachorro.

Otras personas simplemente no dejan que su perro o cachorro huela el culo o los genitales de otros perros, ese es otro gran erro que hará que nuestro perro no se pueda socializar correctamente.

Algunas, ni siquiera dejan que sus perros jueguen con otros perros porque se muerden en el cuello o a veces chillan un poco… Cuando los perros juegan ,es normal que se muerdan e incluso que sin querer se lastimen un poco. Hay que dejarles jugar y aprender a tener sus propios límites, de lo contrario estaremos cometiendo otro gran error en su educación y socialización.

Nunca debemos regañar a nuestro cachorro o perro adulto por intentar conocer a otros perros o por jugar con ellos, mucho menos ir  saludarlos. Aunque si que es recomendable regañar o corregir a nuestro perro cuando tome conductas agresivas, para indicarle que no es lo correcto.

¿Qué pasa si mi cachorro no se socializa?

La falta de socialización o una mala práctica durante la misma, ocasionará que nuestro perro no respete a otros perro o humanos y que viva con miedo. Un perro con miedo es un perro que puede muy peligroso, ya que el miedo puede empujarle a tener conductas agresivas.

Muchos problemas de agresividad, miedos, ladridos excesivos y un larguísimo etc… son producto de una mala socialización durante su infancia. Los perros deben disfrutar de la compañía de otros perros con total serenidad (aunque siempre haya algunos perros con los que se lleve mejor y otros un poco peor, es algo natural).

Si tenemos un perro que no está socializado, debemos intentar socializarlo por nuestra cuenta siguiendo los consejos que exponemos o acudir a un adiestrador para que el nos ayude con el proceso.

¿Cómo socializar a un perro adulto?

Antes de intentar socializar a un perro adulto debemos conocer si se trata de un perro con tendencias agresivas o no. Si es un poco agresivo y sabemos que puede morder a otros perros o personas, deberemos realizar las prácticas siempre con un bozal. Se denomina perro adulto a los perros de más de doce meses de edad.

Es muy recomendable realizar largos paseos por zonas donde hayan personas caminando o trabajando y otros perros paseando. Intentaremos acercarnos a otros perros que estén paseando para que se huelan, la mejor forma es acercarse lentamente y sin miedo, ya que nuestro perro puede detectar nuestro nerviosismo.

Cuando nuestro perro adulto muestre una aptitud positiva frente a otros perros, le premiaremos con una galleta para perros natural o el premio que le solamos dar habitualmente. Si por contrario muestra una aptitud nerviosa o agresiva, nos alejaremos tranquilamente hasta que nuestro perro se relaje.

Debemos pasear cerca de parques para perros, pero no soltarlo. Solamente pasearemos por fuera para que nuestro perro adulto pueda ver a otros perros y en algunas ocasiones saludar a los que se acerquen a la valla. Si nuestro perro los saluda sin agresividad (intenta olerlos) le daremos un premio, para asociar la conducta positiva.

Podemos pedirle a algún amigo que también tenga perro que salga a pasear con nosotros, de esta forma nuestro perro aprenderá a pasear con otros perro y copiar la conducta de un perro que si esté bien socializado.

Es un proceso lento pero que bien realizado aporta grandes beneficios a nuestro perro adulto, ya que le estamos enseñando a vivir en sociedad. Cuando nuestro perro muestre síntomas de ser amistoso, podemos dejar que interactúe con otros perro y juegue con ellos.

Debemos evitar a toda costa el uso de pelotas, palos o juguetes que puedan crear tensiones entre perros. Algunos son muy posesivos con sus juguetes y puede empeorar la situación en vez de mejorarla. No obstante si vemos que somos incapaces, podemos pedir ayuda a un adiestrados canino.

Durante el proceso de socialización debemos prestar atención a algunos aspectos para que el perro note un beneficio real en su día a día y acepte este proceso de forma adecuada.

Algunos consejos que mejorarán la calidad de este proceso son:

• Cumplir las cinco libertades del bienestar animal con: alimentación adecuada y de calidad, confort y comodidad en su día a día, acudir al veterinario si es preciso, dejar que se exprese con naturalidad y evitar a toda costa miedos o estrés.

• Pasear de dos a tres veces al día: Es fundamental que nuestro perra tenga sus dosis diarias y adecuadas de paseo pues el no hacerlo repercute directamente en el proceso de socialización volviéndose un perro que vive aislado, temeroso y nervioso.

• Hacer ejercicio con tu mascota: Es una opción maravillosa para peros nerviosos y con grandes dosis de energía, además, socializar a un perro después de hacer ejercicio es mucho más efectivo ya que el perro se encuentra relajado y tiende a aceptar mejor nuevas situaciones.

• Utilizar el refuerzo positivo como única herramienta en su educación: Es básico que utilicemos este proceso si estamos socializando a un perro adulto. Además lograremos resultados mucho más efectivos y rápidos.

• No pegar ni reñir al perro bajo ninguna circumstancia: Llevar a cabo este tipo de acciones solo empeorarán el proceso de socialización y crearemos en nuestra mascota inseguridades y malestar. Dejaremos de enfadarnos por lo que hace mal y alabaremos aquello que hace bien.

• Anticiparnos a la actitud del perro: Es importante conocer a nuestra mascota y anticiparnos a situaciones en las que el perro pueda pasarlo mal o sentir estrés generalizado.

• Practicar siempre con personas o mascotas tranquilas y que lleven a cabo una actitud positiva para hacer sentir confianza a nuestro perro

• Tener paciencia: No todos los perros superan un miedo o una carencia, otros tardan años y otros sencillamente dos o tres semanas. Es algo que dependerá del caso en concreto y que solo puede determinar un experto, por este motivo si nuestro perro tiene miedo y no quiere relacionarse con otros perros no vamos a forzarle, es preferible esperar a que él dé el primer paso.

• No exponer a nuestra mascota a una situación si no nos lo recomienda el especialista ya que podemos tener un encuentro desagradable.

• Aceptar a nuestro perro tal y como es es el mejor consejo que podemos aplicar, pues si no podemos solucionar nuestro problema en particular tendremos que convivir con él y hacerlo lo más llevadero posible para todo el núcleo familiar.